No, yo diría que es decisión de los demás cortar el bucle. Por si no se ha dado cuenta, me he limitado a contestar a los que por aquí han desfilado aludiendo a mi persona, sin yo haber aludido a la suya.
Y no se preocupe, ni soy don Quijote ni ustedes son molinos de viento, mucho menos gigantes. Mi cordura se mantiene intacta en este punto.
Si es tan amable de no contestarme, ayudará a cortar ese bucle. Bucle que, por cierto, ha contribuido a alargar con su intervención, tan grata como innecesaria. La belleza de lo inútil.
Es que hacer las cosas a medias no me va. Ustedes se refieren a mí, yo les contesto. Ustedes se callan y me dejan en paz, y yo me callo y nos quedamos tan felices. ¿No han pensado en ello? No será porque no lo haya dicho.