El tema Vaquerizo. La historia viene de largo. Alaska y Vaquerizo participan desde hace años en el programa de Jiménez Losantos. Eso hizo que parte de la izquierda española no los viesen con buenos ojos. Por mi parte, nada que criticar, cada uno que vaya donde quiera.
También han apoyado a Ayuso, y yo tampoco los critico, porque cada cual apoya a quien quiere. Lo mismo le ha pasado a Nacho Cano, también criticado.
El tema de las camisetas, en cambio, es distinto. Él sabe perfectamente que cuando se pone una camiseta de la Legión las miradas se posan sobre él, pero al fin y al cabo es un cuerpo militar, aunque la imagen del Cristo con la corona de espinas tiene su qué. Ahora, que Vaquerizo suba a su cuenta de Instagram una foto donde su compañero de grupo exhibe una camiseta con un lema franquista, me parece una provocación innecesaria. Cada uno se mete en los jardines que quiere y no creo que Vaquerizo sea tan tonto para saber que esa foto no va a generar polémica en ciertos sectores de la sociedad. Como digo, a mí me da igual porque es el compañero de grupo de Mario Vaquerizo. Si fuese Ayuso o Buxadé con esa camiseta no me daría igual.
Subo las fotos por si alguien no las ha visto. Él puede hacer lo que le dé la gana. ¿La provocación está en el que mira? Puede ser. Si me pongo una camiseta con una imagen de un Cristo empalmado, habrá quien se moleste.
Lo del Cristo empalmado (perdónenme los creyentes) es un ejemplo que tomo de una polémica que hubo hace años en un festival de fotografía en Mérida.
Edito: por si alguien no se da cuenta, el dibujo que hay tras la bandera de España de la segunda foto es del Valle de los Caídos.