Al Kant más científico hay que buscarlo en el período precrítico:
"Quince años iba a durar este período de su vida como profesor auxiliar (1755-1770). Es el llamado generalmente «período precrítico». Fueron unos años fructíferos, en que Kant trabajó sin descanso. Acumulaba un número ingente de lecciones, 16 a 20 semanales, que completaba con otras particulares para apoyar su precaria situación financiera. La enseñanza versaba sobre gran variedad de materias. En diversos tiempos leyó no sólo lógica, metafísica, filosofía moral, antropología, sino también física, matemáticas, geografía, pedagogía y mineralogía. En su función de lector se atenía a la regla de exponer libros de texto, y en metafísica utilizaba la obra de Baumgarten; pero no dudaba en apartarse de los textos, criticarlos y amenizar sus lecturas con aguda reflexión e ingenioso humor. A ello se añade el ingente trabajo de composición de numerosos trabajos que en este período precrítico publicó, y que reflejan las diversas etapas de formación de su pensamiento."
URDÁNOZ, Teófilo (1975),
Historia de la Filosofía, volumen IV, BAC: Madrid (reimpresión de 2009), p. 9.
"La obra principal de este tiempo es Historia general de la naturaleza y teoría del cielo (Allgemeine Nalurgeschichle und Theorie des Himmels) (1755), que apareció anónima y fue poco conocida. En ella se describe la formación de todo el sistema cósmico a partir de una nebulosa primitiva: la formación de los cuerpos celestes, de las estrellas y multiplicidad de los sistemas estelares, la causa de sus movimientos y de sus relaciones sistemáticas, hasta la comparación entre los habitantes de los diversos planetas. La hipótesis se desarrolla según las leyes mecánicas de la física newtoniana: la materia primitiva tendría ya en sí-la ley que debe conducirla a la organización de los mundos y revela, por tanto, un cierto orden que permite reconocer la huella del Creador. Apunta, pues, al argumento teleológico de la existencia de Dios, el más socorrido en la metafísica escolar de su tiempo. Kant se adelanta así a la hipótesis similar formulada por Laplace en 1796 para el sistema solar. A ambos y otros varios les era sugerida la idea por la Historia natural, de Buffon."
Ibíd., p. 14.
El
Timeo, de Platón, es una obra cosmológica (filosofía natural), no astronómica (matemática). Por eso no hay allí matemática que valga:
"Platón expone fundamentalmente su cosmología en uno de sus diálogos, el Timeo. Aquí la descripción del origen y estructura del cosmos tiene un carácter conjetural destinado a mostrar su racionalidad."
SELLÉS, Manuel (2007),
Introducción a la Historia de la Cosmología, UNED: Madrid, p. 38
Quien sí recogió el testigo de Platón y elaboró un sistema astronómico y, por tanto,
matemático, fue su discípulo el matemático (y filósofo) Eudoxo de Cnido
1.
Es importante notar la diferencia entre un escrito matemático y otro físico (filosofía natural) en la antigüedad. Fue Aristóteles quien hizo hincapié en esa diferencia en su
Física:
"El siguiente punto a considerar es en qué difiere el matemático del físico… ¿difiere la astronomía de la física o constituye uno de sus departamentos? Parece absurdo que el físico tenga que conocer la naturaleza del Sol o la Luna, pero no sus atributos esenciales, especialmente teniendo en cuenta que los escritos de física discuten como es natural su forma y si el mundo y la Tierra son o no esféricos. Ahora bien, el matemático, aunque también trata de estas cosas, con todo no se ocupa de ellas […] Ni siquiera trata los atributos indicados como atributos de tales cuerpos." Aristóteles,
Física, I, 2, 193b-194b.
Nótese que Aristóteles, pese a tener algunas nociones de matemáticas, no fue un temperamento matemático como sí lo fueron, por ejemplo, Eudoxo, Calipo o Arquímedes. Al estagirita lo que mejor se le daba, y con mucha diferencia, era la biología.
En cuanto a los postmodernos, parecen tener una especie de envidia de la ciencia (en sentido contemporáneo). De ahí que en ocasiones intenten adornar su lenguaje y fingir que hay ciencia donde no solo no hay ciencia, sino que puede que ni tan solo filosofía. Francamente, este tipo de pseudofilosofía representa el cadáver andante que es hoy en día la filosofía en ambientes continentales. Los postmodernos, además, siempre han hecho énfasis en la separación entre ciencia y filosofía. Y así les luce el pelo, como suele decirse:
"El tema de las dos culturas —científica y humanística— ha sido repetidamente sacado a la luz y discutido desde la emblemática conferencia de Charles Percy Snow en 1959. Es imposible ahora resumir su alcance y consecuencias. Poseemos al respecto contribuciones tan lúcidas como las que no hace mucho realizó Emilio Lamo de Espinosa. La sensibilidad postmoderna ha elogiado la diferencia y advertido contra los que pretenden instaurar por doquier la unidad. Bien está que lo hayan hecho en la proporción que es justa, pero lo cierto es que no hemos tenido que esperar a los últimos tiempos para que reine entre nosotros la escisión."
ARANA CAÑEDO-ARGÜELLES, Juan (2006),
El proceso histórico de separación entre ciencia y filosofía, Madrid: Editorial de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, p. 17. [la descarga es legal y muy pero que muy recomendable]
Por cierto, el caso que menciona Absurdum en su mensaje #41209 de
este hilo, sobre que Deleuze y Guattari recurren a algo parecido a la matemática en su obra
Qué es la filosofía, recuerda mucho al caso de Nietzsche, quien también intentó dar apariencia científica a su modelo cosmológico de fuerzas en perpetuo devenir:
"Nietzsche señala también la persistencia de las fuerzas en el universo en cantidad eternamente igual, según el principio de la conservación de la energía2."
URDÁNOZ, Teófilo (1977),
Historia de la Filsofía, volúmen V, BAC: Madrid (reimpresión de 2000), p. 513.
A las obras propuestas por Absurdum, donde el papel de la matemática parece irrelevante (la obra de Deleuze y Guattari no la conozco), propongo las cuatro siguientes, donde la matemática resulta imprescindible:
- Los Elementos, de Euclides
- Dialogo Sobre los Dos Máximos Sistemas del Mundo, de Galileo
- Principios matemáticos de la filosofía natural, de Newton
- Exposición del sistema del mundo, de Pierre-Simon Laplace
Sobre la obra de Euclides algo se veía en la asignatura Historia General de la Ciencia I, de Grado. Al menos cuando la asignatura la llevaba el profesor Carlos Solís. Ahora no sé cómo estará el asunto.
Las obras de Galileo y Newton son de obligatoria lectura y estudio en la asignatura de Máster
Aspectos de la ciencia moderna: matemáticas, física e ideología, del profesor Solís.
Parte de la obra de P-S. Laplace la leí en la asignatura
Pensamiento cosmológico: aspectos históricos, del profesor Sellés.
A ver, hay obras de filosofía donde la matemática supone un cero a izquierda. Pero otras, como las de arriba citadas por mí, son imposibles de abordar sin ella.
En general, tras
el proceso de separación entre ciencia y filosofía, ésta última, salvo en el caso de la filosofía analítica, prácticamente se olvida de la matemática y del método científico. Pero hasta mediados del siglo XVII, como todo era filosofía, la matemática forma parte de muchas de las mejores obras de filosofía. Si hubiese que poner fecha a la ruptura entre ciencia y filosofía, ésa sería el año 1857:
"Lo cierto y verdad es que la fundación de la Academia de Ciencias Naturales data de 1834 y la Academia de Ciencias Morales y Políticas de 1857, precisamente el año de promulgación de la ley Moyano, que consagraba legalmente la separación de ciencias y letras. Poco tiempo pues tuvimos para evitar el desastre: El artículo 31 de dicha ley rompía en dos la vieja facultad de artes creando en su lugar la de filosofía y letras por un lado y la de ciencias (exactas, físicas y naturales) por otro. La filosofía, que antaño efectuaba la síntesis global del saber, quedaba escorada hacia las humanidades, puesto que en las materias contempladas en el artículo 34 para la facultad de ciencias no figuraban más que conocimientos especializados."
Arana Cañedo-Argüelles, 2006: 23.
Por tanto, creo que tema del hilo no está muy bien planteado. En mi modesta opinión no tiene sentido hablar del papel de la matemática en filosofía, así, sin más. El papel de la matemática es imprescindible o irrelevante en filosofía con arreglo al período de que estemos hablando. Al respecto podemos sintetizar la cuestión de los siguientes tres puntos:
1. Hasta mediados del siglo XVII la matemática y la filosofía natural (física) son absolutamente habituales en muchas obras filosóficas. Hasta entonces la filosofía aglutinaba todo el saber.
2. Entre mediados del siglo XVII y hasta mediados del XIX (aproximadamente) se va consumando la separación entre ciencia y filosofía. Los filósofos van perdiendo el tren del conocimiento y se van limitando a la especulación "facilona".
3. Desde mediados del siglo XIX y hasta la fecha, la separación entre ciencia y filosofía es prácticamente total. Sin embargo, los filósofos analíticos contemporáneos (lógica y filosofía del lenguaje) no abandonarán la nomenclatura matemática. Y entre los filósofos continentales habrá quienes la hayan estudiado, si bien en sus obras de filosofía no recurrirán a ella. Es el caso de Henri Bergson, por ejemplo.
Notas:
1. Cfr. Sellés, 2007: p. 41
2. Que coincide con la Primera Ley de la Termodinámica.
PD: si has llegado hasta el final de este mensaje, te felicito.