Agripa escribió:
Conrado escribió:Con respecto a las antropologías no sé si has cursado Antropología filosófica I. Allí se habla de la diferencia entre Antropología social y filósofica y entre filosofía y ciencia. La visión del profesor es la que más se comparte hoy en día: la ciencia tiene que delimitar su campo de acción. Así, la Antropología social tiene delimitar su espacio espistémico.
En esto ya no estoy de acuerdo. La Antropología social no es una ciencia más que de manera intencional, porque no podría jamás delimitar ningún “espacio epistémico” si pretende estudiar al “Hombre” o a la “Cultura”, que son ideas filosóficas y no conceptos categoriales científicos.
Ese es uno de los reproches que el profesor San Martín le hace a la Antropología social con respecto a la noción de cultura. Como bien dices, se trata de un concepto filosófico. Pero la AS no se preocupa del aspecto ontológico de la cultura. La da por existente y se limita a estudiarla, pero obviando los aspectos ontológicos. Y aquí es donde reside la delimitación que hace la AS para poder ser una ciencia empírica. Por eso estoy de acuerdo en que, como dices, la AS es una ciencia sólo de manera intenacional, pues si realmente fuera todo lo holista que dice ser, sería sencillamente inabordable todo el estudio que pretende llevar a cabo. Y precisamanente por eso no tiene más remedio que acotar. Y fruto de ese acotamiento es, entre otros, el obviar los aspectos ontológicos del concepto de cultura.
A continuacón te muestro una pequeña parte de lo que te encontrarás en el manual de AF II (tema proporcionado por el profesor en PDF). Creo que en lo que sigue se ve perfectamente lo que quiero decir; en realidad, lo que quiere decir el profesor San Martín:
"El referente usual de los antropólogos en cuanto al concepto de cultura es la definición dada por Tylor, que agrupa bajo ese concepto el uso de productos de la actividad humana, de los que por experiencia sabemos que se heredan o que se transmiten socialmente en el seno de la sociedad. Esta definición, que ha sido tomada como canónica en el ámbito de la etnografía, debido a su éxito epistemológico ha pasado a ser la definición de la cultura con carácter general.
En el primer capítulo de su «Primitive Culture» (1871), Taylor afirma que la cultura o civilización en sentido etnográfico amplio, es aquel todo complejo que incluye el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres y cualesquiera otros hábitos y capacidades adquiridos por el hombre en cuanto miembro de la sociedad.
Tenemos tres partes en esta definición:
1) la cultura es un todo complejo, un ámbito de realidad que sólo se consigue sacando al ser humano del dominio de la naturaleza, de sus instintos;
2) el contenido de ese todo complejo es una lista abierta e imprecisa; se trata de realidades que no pueden ser conocidas en sentido estricto porque de ellas no hay experiencias; y
3) todo el complejo cultural ha de ser adquirido por el ser humano en cuanto miembro de la sociedad. No basta con que una costumbre sea costumbre de uno, sino que tiene que estar asentada en el grupo y los individuos del grupo deben adquirirla de él.
La
limitación básica de la idea etnográfica de cultura de Taylor consiste en que la cultura es vista desde una «adquisición» por parte de las personas que participan de ella y no desde la «producción» de la misma, que es el requisito para que sea aprendida.
Para el antropólogo [social y cultural] la perspectiva de la adquisición es suficiente porque va a describir una cultura
ya formada, que es lo que le interesa,
pero para el filósofo puede ser insuficiente. En una cultura ya dada al antropólogo le interesa, primero, señalarla y
acotarla, para luego describirla y ver las relaciones que sus partes guardan entre sí.
Por eso Tylor toma la cultura como una realidad
ya constituida y en ese mismo momento obviará los problemas fundamentales de una definición ontológica de la cultura, porque no le es necesario hacerlo.
Lo lamentable de esta situación es que, insistiendo la definición en una sola faceta; la adquisición, los filósofos la den por definitiva y sean incapaces de ir más allá, cuando la definición no pasa de ser una descripción enumerativa de elementos agrupados por una seña de identificación tomada desde una perspectiva externa, es decir, que ya la da por supuesta. Este concepto gnoseológico pragmático de cultura
nunca se cuestiona los rasgos ontológicos que muestra eso que se trata de adquirir o transmitir."
Como ves, la AS sí acota, y por eso es una ciencia en sentido (semi)fuerte. Si no acotase sería, según la idea (creo) del profesor San Martín, AF.