Como dice Demóstenes, el principio antrópico se entiende actualmente en sentido fuerte y en sentido débil.
Pero el primero, que vendría a ser un (...) las leyes de la naturaleza son las que son "para" perimtir la existencia de la vida(...) está bastante desacreditado, sobre todo porque se aproxima peligrosamente al creacionismo o, al menos, tiene un aroma teleológico que no suele gustar a los científicos.
El que tu enuncias es el débil. Es útil, en mi opinión, como guía para hacer ciencia. Que yo sepa la primera aplicación es la que se imputa a Fred Hoyle, que lo usó para, de entre las varias opciones teóricas que explicaban la formación del carbono en el interior de una estrella, elegir aquella necesaria en un Universo con capacidad para crear vida tal y como la conocemos. ¿Obvio? Puede ser.
Ligado al asunto del principio antrópico está el del "sorprendente" afinamiento que tienen las constantes físicas, de manera que permiten un universo con vida como el nuestro, y en las que -al menos en algunas de ellas, desconozco si en todas- un pequeño cambio en su 5º o 6º decimal hubiera devenido en un Universo sin vida, o sin materia, o con ella pero incapaz de generar estrellas...
Por úlitmo, el principio antrópico, para evitar esta aparente teleología (en el caso del fuerte) y explicar esa increíble lotería cósmica que parece nos ha tocado (en el caso del débil), ha servido como inspiración teórica de la hipótesis -que yo sepa no teoría todavía- del multiverso, del cual el nuestro sería uno de ¿infinitos? universos "burbuja" insertos en aquél. Según esto, sólo en nuestro universo y quizás unos pocos más sería posible algo como la vida.
Cabe decir que este multiverso no tiene nada que ver con el de los universos paralelos de la cuántica (Everett), en cuyo caso se alude a que el universo se "escinde" a cada elección que hacemos.
A quien le interese el asunto y vaya bien de inglés quizás quiera ver este
documento, con la atrevida y sorprendente -y pese a ello bastante rigurosa- propuesta de Max Tegmark. El documento tiene ya unos años y desconozco el desarrollo posterior que hay podido tener, pero sigue siendo válido en lo esencial. !Ah!...Y con Platón en todo lo alto, por cierto, para no dejarse un callo sin pisar.
Saludos.
PS: ¡Glups! Hablamos de Teoría del conocimiento. Disculpas.
No curso esa asignatura, así que cuidado con mi comentario. No es que crea que es falso, pero no sería la primera vez que o bien la opinión del profesor o autor del manual, o bien el estado de la cuestión respecto a la actualidad ha cambiado lo suficiente como para no estar muy seguro de qué poner en el examen...