Estimados:
Yo ya sabía que Descartes apostaba por la inmortalidad del alma. Y también había leído que en la Glándula Pineal tenía lugar un intercambio sanguíneo. Lo que sucede es que parece extraño que si la Glándula Pineal juega un papel tan importante en las relaciones res cogitans y res extensa, aquélla pueda sobrevivir tras la descomposición de ésta, por más que Descartes apueste por la inmortalidad del alma.
Les cito el argumento por el cual Descartes sostiene que se juntan todas las impresiones emanadas en la citada glándula, a partir de la doble naturaleza de las demás partes del cerebro, salvo la Pineal. De hecho, no lo trató en sus Meditaciones, fue en esta obra donde da una explicación. A todas luces trató patéticamente de justificar lo injustificable (la razón de la Pineal es que era la única no-doble (!!!) , ¿no sabía que la pituitaria también es una?)
La razón que me convence de que el alma no puede tener en todo el cuerpo ningún otro lugar que esta glándula donde ejerce inmediatamente sus funciones, es que considero que las otras partes de nuestro cerebro son todas dobles, de la misma manera que tenemos dos ojos, dos manos, dos oídos, y todos los órganos de nuestros sentidos son dobles; y que, puesto que no tenemos más que un único y simple pensamiento de una misma cosa al mismo tiempo, por fuerza ha de haber algún lugar donde las dos imágenes que vienen por los dos ojos, o las otras dos impresiones que vienen de un solo objeto por los dobles órganos de los otros sentidos se puedan juntar en una antes de llegar al alma, a fin de que no le representen dos objetos en lugar de uno; y se puede concebir fácilmente que estas imágenes u otras impresiones se juntan en esta glándula por medio de los espíritus que llenan las cavidades del cerebro, pero no hay en el cuerpo ningún otro lugar donde puedan unirse así, sino después de haberse unido en esta glándula .
Descartes, René, Las Pasiones del Alma, Editorial EDAF, Madrid, España, 2005, art. 31.
Un poco inverosímil la explicación de Descartes incluso para su época.
Absolutamente y a partir de esta imposibilidad de explicación es que surge en filosofía la llamada Filosofía de la mente.
De hecho Mente y cuerpo son irreductibles una a la otra ( concebidas como expresiones ontológicas diversas) serían categorialmente diferentes.
Entonces se presentan dos problemas:
a) ¿ es la res cogitans inmortal? De hecho, sin referirnos a Descartes sino que por "a contrario sensu" de a res extensa, deberíamos concluir que sí. O al menos no podemos presentar argumentos para lo contrario.
b) ¿Puede haber más de una res cogitans?
El tema no es menor porque careciendo de extensión, carece de todas las nociones de fronteras, limites, interacción etc....
Sé que a muchos les disgusta el estilo de SOY,( y por eso se acabó el otro post), pero en esta deducción se anotó un punto fuerte:
Al no poseer extensión la res cogitans... ¿cómo la concebimos en un locus..? parece imposible
¿Es lícito decir "hasta aquí llega mi res cogitans y empieza la tuya?
saludos