Elías
Las denominadas desigualdades de Bell lo que tratan de establecer son los parámetros que deberían de cumplirse para que un “elemento” sea considerado local y real. Son fruto de la lógica y no herencia del formalismos de la física cuántica.
Claro que es herencia del formalismo de la física cuántica, para empezar el experimento propuesto se basa en el Entrelazamiento, uno de los tótem de la mecánica cuántica, y está diseñado con la idea de invalidar el modelo de variables ocultas, y eso es lo que intentan y el objetivo que dirige a los experimentadores que tratan de llevarlo a la práctica…un poquito sesgado no…
Pero el problema es más de fondo. La diferencia básica entre la mecánica clásica y la cuántica es como se interpreta el acto de medir.
Clásica: los estados físicos existen antes de ser medidos
Cuántica: los estados físicos se definen en el acto de ser medidos.
La mecánica cuántica se circunscribe al mundo subatómico. En el mundo subatómico resulta que usamos aparatos de medición que son tan grandes como lo que tratamos de medir. Imaginemos que pasaría si para estudiar el Sol usáramos un telescopio gigantesco tan grande como el sol, está claro que todas las propiedades del Sol se alterarían.
Para nuestra desgracia resulta que los aparatos de medición que tenemos, por sofisticados que sean, todos interaccionan a nivel subatómico con lo que se trata de medir, alterando sus propiedades. Solo usando “trucos” conseguimos acotar esas alteraciones y conseguir medidas aproximadas, probabilísticas: la mecánica cuántica.
Por tanto las desigualdades de Bell es una doble trampa lógica.
Por una parte, en el experimento es esencial el fenómeno cuántico del Entrelazamiento, que ya de por si está en contra de una teoría de Localidad (los estados físicos tienen una velocidad de propagación finita) y Realidad (los estados físicos existen antes de ser medidos)
Y por otra parte, el único sistema que tenemos para medir a nivel a subatómico son aparatos que alteran el objeto observado, a los que por lo tanto hay que aplicarles las técnicas de la mecánica cuántica para obtener unos valores probabilísticos.
Así que tenemos unos experimentos que se basan en el Entrelazamiento, una propiedad que ya en si contradice una teoría de variable oculta, y el único sistema para medir experimentalmente es la mecánica cuántica…a ver como sale un resultado experimental que no avale la mecánica cuántica.
Con las desigualdades de Bell es imposible conseguir nunca unos resultados experimentales que avalen una teoría de localidad-realidad. Es una trampa matemática sofisticada. Y para colmo, los experimentos realizados a día de hoy son “aproximaciones” al propuesto por Bell y con más “agujeros” que un queso de Gruyere...
La única forma de conseguir demostrar una teoría de localidad-realidad es conseguir unos aparatos de medición que no alteren los objetos subatómicos que miden. Y eso ni si quiera sabemos cómo plantearlo hoy por hoy.
Que hoy en día solo tengamos aparatos de medir que alteran los objetos subatómicos, no implica que sea falsa la teoría de localidad-realidad, puede simplemente ser un problema de no contar con aparatos de medición más exactos. Asimismo hay una realidad persistente, en el mundo macroscópico no se observa el Entrelazamiento y en el subatómico solo se observa en condiciones extremas de laboratorio. Al igual que pasa con la Localidad y la Realidad, que se cumplen perfectamente en el mundo macroscópico y en el subatómico, y solamente parece que no se cumple el de Realidad a nivel subatómico en los laboratorios humanos….A lo mejor resulta que la mecánica cuántica es un sistema de corrección de errores causados por los aparatos de medición de que disponemos, que invariablemente afectan al objeto subatómico medido, y que las partículas elementales tienen muy claros sus valores…