La diferencia entre un ángel y un demonio no es que aquel haga buenas acciones y éste malas sino que aquel vive angelicalmente y por eso hace buenas acciones y éste vive demoníacamente, y por ello, hace malas acciones.
Lo de los ángeles y demonios está bien porque lo que es bueno o malo realmente no lo sabe nadie salvo su jefe, Dios. Pero como ya le dimos papeleta, bueno es quien cumple con unas acciones porque los sentimientos son demasiado involuntarios como para poder juzgarlos.
Volviendo al hilo, me gustaría aclarar algunos puntos. ¿Por qué creo que la filosofía es corrosiva? A nadie le gusta que le pongan en duda sus convicciones, hay algo interior que nos resulta sagrado y que no deseamos sea cuestionado, ya sea por otros o nosotros mismos. Filosofar es cuestionar nuestros cimientos más sólidos: creencias, valores, ideología, que nos han permitido desarrollarnos.
Cierto que al final podemos volver a ellos o incluso estudiar filosofía sin hacerlo. Sin embargo, en mi opinión, esto es estudiar filosofía, no filosofar. Filosofar, a mi juicio, es un estado metastable de valores y significados que lo cuestionan todo, desde lo que es tabú hasta los pensamientos rumiantes que nunca se alejan pasando por todo los que damos por sentado.
¿Alguien pensó que filosofar le deparará felicidad y estabilidad? Más bien se lo dará la religión o formas secularizadas de ella que pasan por ser filosofías.
Un ejemplo de lo que quiero expresar es el psicoanálisis. Su punto de unión con la filosofía es el cuestionamiento del ser humano y todo lo que en él está dado. Si uno tiene un interés especial por indagar en su infancia porque tiene un exceso de tiempo libre y dinero, el psicoanálisis está muy bien pero pocos psiquiatras o psicólogos lo recomendarán como terapia a alguien que necesite alguna.
¿Con todo esto quiero decir que la filosofía o el psicoanálisis es causa de los grillos de alguien? No, ni mucho menos, pero no son lo más idóneo para superar ningún tipo de crisis mental.
¿Qué ocurre con las personas aquejadas de algún tipo de enfermedad mental crónica, no deberían acercarse a la filosofía? No digo tal cosa, pero que no se lo tomen demasiado en serio y que la estudien con una cierta distancia, es decir, que filosofen poco. Puede llegar a ser muy obsesiva y no merece la pena que le acabe perjudicando a uno. Yo lo hago así y eso que no tengo nada diagnosticado por el momento así que no se me ocurre por qué debería recomendar lo contrario.
Saludos
PS: Cum Lupus, de matemáticas me queda un curso y medio que nunca terminaré porque la vida no me da para más. Lo digo porque el ejemplo de Ciencias Exactas es muy malo, malísimo, te lo puedo asegurar...