Que maravilla que la música siga siendo lo que nos une a muchos. Estoy descubriendo tanto que me faltan horas para llegar a escuchar todo lo que estáis poniendo aquí. Lo último que he descubierto es al Niño de Elche que nos ha traído Xana (cúrate pronto), pero todo lo demás me está encantando. La última mala noticia es lo de Aute. En fin. Habrá que hacerse fuerte en este cielo hermético de ahora mismo.
Os traigo a uno de mis iconos y al que me he prometido ir a ver en directo en cuanto esto se acabe de una vez. Fito con su guitarra cantando porque sí, en vivo y en directo, gratis. En estos tiempos se valora aún más lo que se hace para acercarse al otro. ¡Bien por Fito!.
Por si alguien no lo conoce, el programa Música y Pensamiento de RTVE a la carta. Os dejo el enlace del último capítulo (Victoria Camps, Montaigne, Camus, Descartes, al alimón con Ravel, Schönberg, y unos cuantos más...)
Este es el Cuarteto para cuerda, n.º 14 en re menor (Der Tod und das Mädchen - La muerte y la doncella). En la enérgica versión del Cuarteto Alban Berg.
El poeta Matthias Claudius fue el autor de los versos de La muerte y la doncella, poema al que Schubert puso música en 1817.
Recomiendo los dos primeros movimientos.
El cuarteto empieza con un agitado "Allegro" que expresa la lucha desesperada de la doncella contra la muerte.
El segundo movimiento es un tema principal y cinco variaciones, de las cuales la última está armada sobre vertiginosos arpegios.
Y esta es la versión insuperable del Cuarteto de Tokio:
El Pensión Triana de Javier Ruibal es otro de mis discos favoritos, pero no conocía esa versión de La flor de Estambul.
Soy incondicional de Ruibal desde que, acabando yo la carrera, publicó aquel disco en directo... lo iba a ver cuando podía a la Galileo Galilei donde por temporadas toca todos los meses... Hace poco hizo otro directo, estupendo como aquel, aunque sigo prefirendo el primero aunque es verdad que ahora que lo acabo de poner me ha sonado un poco a lata comparado con lo que has puesto tú:
Buena tarde a todos
Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla
Con la inspiración de esa frivolidad maravillosa, que para mi tiene más de los segundo que de lo primero, dejo otra frivolidad, y por partida doble, para que sea más frívolo. Ojalá os guste.
Preciosas "frivolidades" Y ese "sofoco en el balcón". He alcanzado a escucharlo todo. Muy especial fue del Parsifal de Wagner, los encantamientos del Viernes Santo, lo escuché la noche del Martes pero también tuvo algo de, de... Yo que sé cómo expresarlo
Por si alguien no lo conoce, el programa Música y Pensamiento de RTVE a la carta. Os dejo el enlace del último capítulo (Victoria Camps, Montaigne, Camus, Descartes, al alimón con Ravel, Schönberg, y unos cuantos más...)
He visto luz dentro del caos. Una verdadera preciosidad de programa, que no conocía y, que por supuesto, me apunto con letras doradas. Las reflexiones de la presentadora me han parecido magistrales, la música una maravilla. Gracias Marcoaurelio por la propuesta. Muy a tener en cuenta.
Del resto, Zolaris que me hace descubrir a una maravilla como Laura Gibson, Xna, Cuervo Ingenuo, Moira, Castlelita, Cantuarensis, Lapidario, los demás, gracias por compartir vuestras pasiones, gustos, momentos. La música une. Y ahora más que nunca.
Yo voy a compartir una de mis canciones icono. De esas de las que nunca me olvido. Nunca nadie la ha interpretado con él mismo, su autor. Una de las canciones más bonitas del mundo para mi gusto.
Antonio Vega se nos fue. Pero a muchos nos dejó poder volver a revivir una sensibilidad a flor de piel cuando de verdad necesitamos acurrucarnos en nuestro sitio privado-particular-necesario para renacer una vez y otra y otra.
Y aquí Antonio Vega cantando su canción con la misma sensibilidad que el primer día, pero ya muy enfermo. Miguel Bosé le acompaña, con una sensibilidad pasmosa. También esta versión me encanta.
Seguramente Antonio Vega haya sido otro, uno más, de los regalos que afortunadamente vamos recibiendo a lo largo de nuestra vida.
Dejo aquí «Amor», del Lamento della Ninfa, 8.º Libro de madrigales de Monteverdi:
Y un Canario. Esta danza cortesana española de los siglos XVI y XVII se caracteriza por una técnica compleja que consiste en el arrastrado y la percusión de los pies contra el suelo: