El otro día, una de las canciones que propuso zolaris, White Rabbit (Jefferson Airplane), me hizo pensar en otras piezas psicodélicas.
Recordé Sunshine of Your Love y Strange Brew, de Cream. You're Gonna Miss Me, de 13th Floor Elevators. Feels Like We Only Go Backwards, de Tame Impala. Riders on the Storm. de The Doors. Stairway to Heaven, de Led Zeppelin...
Pero, sobre todo, me acordé de Where Is My Mind?, de Pixies.
Y también de Tomorrow Never Knows, de los Beatles.
(Los responsables de la serie Mad Men desembolsaron 250000 dólares por usar esta canción para cerrar el episodio 8.º de la 5.ª temporada, titulado Lady Lazarus.)
Y a punto he estado de subir una actuación de unos amigos versioneando a los Pixies. Que nos volvían locos, y aún lo siguen haciendo. ¡Qué canción, Moira!
Y a punto he estado de subir una actuación de unos amigos versioneando a los Pixies.
Podría ser una buena idea...
Respecto a Alta fidelidad. Es una película que empecé considerando sobrevalorada y con la cual me he reconciliado con el tiempo y tras unos cuantos visionados.
La música puede ser abordada por reflexiones y conceptos pero el lenguaje musical tiene otra forma de acción más directa. La música despierta, hace tomar conciencia del deseo, y si ese deseo no se adapta a la norma? la música nos enseñarà a transgredirla. Bailemos.
Qué bonita versión de What a wonderful world, muchas gracias, Castlelita. A esta canción le tengo muchísimo cariño: siempre ha sido de mis favoritas... Me provoca una especie de saudade, melancolía alegre por así llamarla. Se me metió aún más en el corazón durante una performance con música en directo que hice con mi pareja, en la que el grupo de jazz que improvisaba eligió precisamente What a wonderful world para el final de la actuación.
Llevo días bastante deprimido y desanimado. Se nos murió el gato hace días: con la de tragedias que están cayendo por todas partes puede parecer banal, pero joder... Llevaba dieciocho años en la casa y le teníamos mucho cariño. Y esta semana se me ha hecho dura: teletrabajo con un montón de faena y dificultad para concentrarme, preocupación por mis padres aislados en su ciudad, falta de energía, creatividad y propósito, dudas sobre cómo será el mundo que saldrá de todo esto, desánimo con las asignaturas que se supone que debería estar estudiando y no consigo hacerlo de ninguna de las maneras... Y de nuevo, ya sé que son problemas menores y que otra gente lo tiene mucho peor, pero eso no quita que me sienta bastante pufffff...
En fin. En cualquier caso, pensar en What a wonderful world me ha hecho venir a la memoria otra canción que a priori no tiene nada que ver, pero que también me encantaba de niño... Y por algún motivo las asocio ambas. Wandering star, cantada por Lee Marvin en la maravillosa La leyenda de la ciudad sin nombre.
Lo primero de todo, Lapidario: siento mucho, muchísimo lo de tu gato. No es nada baladí, yo sé lo que duele su pérdida y es mucho.
Estoy prácticamente igual: desanimada por todo lo que nos rodea y sin capacidad de concentración. No sé si llegaré a tiempo para terminar mis trabajos de Antropología Cultural II y eso que la asignatura me gusta, pero ni con esas...
Por cambiar de tercio agradecerte a tí, Lapidario, traer al gran Lee Marvin, uno de los grandes...No sé, en otro momento que esté más inspirada, buscaré una escena suya (que con esa voz...) y la llevaré al hilo de "ESCENAS ERÓTICAS"
Iba a dejaros una canción de la Banda Sonora de mi vida en esta última semana: la maravillosa voz de Sting, versionando Jazz, pero ¡he encontrado el disco entero en youTube!
Hola
Pues me parece tan licito llorar por tu gato, Lapidario, como sentir miedo, aprensión o desanimo, faltaría más, con la que se nos ha echado encima. Yo os mando un soplo de brisa fresca
Pd. Llevo ocho episodios de Neon Genesis Evangelion, me encanta su tinte futurista con cabinas de teléfono, tostadorad y "Evas" que me traen un tufillo a Mazinger Z