Estoy de acuerdo con todos en que el libro de Marzoa es difícil, aunque también quiero decir que me parece una maravilla. Yo llevo tipo un tercio leído o menos, pero me parece estar de acuerdo en lo que dice, o sea, quizás me covence o lo veo parecido. Copleston es tan sencillo que me gusta mucho, pero Marzoa aporta una perspectiva en abstracto, como explicado todo por un filósofo, y que por eso aporta un matiz más específico que un manual normal, que un manual no escrito por un filósofo, sino por un experto en filosofía. El Marzoa me encanta aunque cueste tanto leerlo, y no veo una sola coma de superficialidad o de paja en ese libro, sino un ir a la descripción puramente filosófica en todo momento. Creo que aunque no lo parezca Marzoa siempre va al grano, a la raíz, y casi me río de pensarlo y decirlo, porque quizás muchos pensáis justamente que no va al grano. Si uno vuelve a él al finalizar la carrera como decís, quizás es un gran libro, entonces me alegro de haberlo encontrado ya.